Las elecciones han terminado y tal y como se preveía, el Partido Popular –pese a que su número de votantes sea prácticamente el mismo-ha conseguido finalmente la mayoría absoluta. Se acercan tiempos oscuros para la supervivencia del estado del bienestar y de la propia democracia que, presumiblemente, será subordinada en los próximos cuatro años a los intereses de los llamados mercados.
La puerta abierta a esta situación la ha marcado el PSOE con su gobierno de hipócritas que ha vendido a los trabajadores frente a los bancos, dejando un balance catastrófico: reducción de derechos sociales básicos, congelación de pensiones, retraso en edad de jubilación, casi cinco millones de parados… El ejecutivo de Rodríguez Zapatero no ha dudado en vender sus principios socialdemócratas, como tantas veces ha hecho, para ganarse el favor de aquellos que provocaron la crisis y que ahora no quieren pagar sus consecuencias y por ello ha sido castigado por sus votantes, a la vez que alabado por la CEOE que poco después de acabar la convocatoria electoral, manifestaba su agradecimiento al traidor Zapatero.
IU ha pasado de dos a once diputados y ha aumentado su resultado en casi setecientos mil votos aunque, de tener una ley electoral justa, se hubiesen merecido muchos más parlamentarios. Para IU ahora queda la responsabilidad de responder a esta confianza y tomar la calle frente a la ofensiva que preparan los mercados. No estamos solos, más de un millón y medio de votantes nos apoyan, es la hora de salir a las calles para defender la democracia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario